Cayendo
Cayendo Acostado en una congelada cama
acompañado solo por píldoras
bañado
por un frió vapor otoñal
mi
corazón divaga en el final.
Escucho el ronquido de mi pecho
que
llama a mi alma
para que lo apague, lo lleve cerca
de la
frontera donde ya no existe dolor.
Apago mis ojos
cierro
mis oídos
me
entrego a los
brazos
del sol.
Desde
ahí arriba veo mi vida
mis
dolores mis heridas
canto
un himno a la vida
me
entrego al aire y caigo.
Cayendo voy dejando los pesares
olvidando tus puñales
entregando mi sangre
despidiendo mis ilusiones.
Contra
el suelo desparramo mis miembros
me divido en mil fragmentos
soñando con que tu amor me una
y me fundas en uno contigo.
Diego Hernán Raquita 10-5-2015
Buenos
Aires, Argentina COPYRIGTH 2015.
- DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR.-