TIEMPO
¿Qué es el tiempo?
El que marca el reloj con sus diminutos brazos
pretendiendo abarcar un mundo,
el que decide el paso de los días
los minutos y las horas.
El que acomoda las cosas
con su ritmo y su candencia
sin importar el apuro que tengamos.
Se fue el tiempo de este año
el acordado, el regalado el que cabe
en trescientos sesenta y cinco días.
Los minutos que se agolpaban
creaban horas que jugaban
y nos embarcaban en días
tan nuestros que a cada paso
nos convertíamos en nuestro
propio reloj de vida.
En este tiempo escaso
en el que muere el año
los momentos son instantáneos recuerdos
que con extrañeza miramos
sin saber como pasaron
pero sabiendo que jamás
volveremos a ser los mismos
porque cada segundo vivido
dejo huellas acorazadas en el alma.
Cambiamos cada momento
para lograr una luz que ame
los días pasados como un
estandarte de lo construido
para que lo que viene sea maravilloso.
En las alas del tiempo
viajaron los sentimientos
que surcaron en este año la misma vida
cada instante fue un grano de arena
que formo un mundo regalado por Dios.
El último suspiro del año
todas las imágenes,
todos los momentos
risas, llantos, dolores, música,
poesía, libertad, encierro,
pero siempre la lucha
por ser mejores y ser felices
por los que amamos, por nosotros.
Paso el tiempo y ni cuenta nos dimos
pero si notamos la riqueza del cariño
que se nos regalo!
GRACIAS!
Valentina Landa Diego Raquita
Jupiterianos
27 de diciembre de 2016
martes, 27 de diciembre de 2016
jueves, 15 de diciembre de 2016
No importa
Llega como una tormenta
vistiendo mi nube de color.
Lo cuento mil veces
mas nadie cree
que su sola
presencia llene mi mundo.
vistiendo mi nube de color.
Lo cuento mil veces
mas nadie cree
que su sola
presencia llene mi mundo.
Si señor lea bien
no la vi jamás
más que me importa
si es negra o blanca,
colorada o amarilla,
o azul o naranja,
si en ella vive
el pigmento de la creación.
no la vi jamás
más que me importa
si es negra o blanca,
colorada o amarilla,
o azul o naranja,
si en ella vive
el pigmento de la creación.
Por eso señora
que me cambia
si es alta o enana,
si es gorda o
se transluce al
chocar con el sol.
que me cambia
si es alta o enana,
si es gorda o
se transluce al
chocar con el sol.
Que mas da sI es
derecha, zurda,
si en sus manos
vive la magia del arte.
derecha, zurda,
si en sus manos
vive la magia del arte.
Que me importa si
lleva un treinta y seis
o un cuarenta y cinco
en sus pies
si con sus alas plateadas
me lleva a volar al
bello planeta del amor.
lleva un treinta y seis
o un cuarenta y cinco
en sus pies
si con sus alas plateadas
me lleva a volar al
bello planeta del amor.
Y ustedes dirán señores
que todo esto ya lo dijo
el gran Oliverio
pues claro estoy seguro
que fuimos nosotros
en otra vida.
que todo esto ya lo dijo
el gran Oliverio
pues claro estoy seguro
que fuimos nosotros
en otra vida.
Diego
viernes, 9 de diciembre de 2016
kilometros
Doy la vuelta a este planeta
mil y una veces por día
montado en sus locas alas.
Locas alas compañeras de viajes
locos, imaginarios, siempre
sinceros, juntos y felices,
surfeando nubes eternas
de agua y besos dulces.
Viajamos guiados por una luz
tan brillante que es imposible
no seguirla hasta el cansancio
ese que cierra nuestros ojos
y nos abraza en un sueño lleno de letras.
No conocemos el final del camino
porque no recordamos como comenzamos,
porque jamás hablamos del final,
Quizás por miedo, quizás por costumbre,
Quizás porque amamos volar juntos.
Me poso en sus alas haciéndola reír
su risa es el combustible que mantiene
nuestro idilio volante en el aire
nos eleva sobre el sol y vemos
como pasan las sombras del ayer.
Abrazados en nuestra ruta aérea
somos un par de locos que no sabemos
nada más que volar unidos.
Diego
ç
Doy la vuelta a este planeta
mil y una veces por día
montado en sus locas alas.
Locas alas compañeras de viajes
locos, imaginarios, siempre
sinceros, juntos y felices,
surfeando nubes eternas
de agua y besos dulces.
Viajamos guiados por una luz
tan brillante que es imposible
no seguirla hasta el cansancio
ese que cierra nuestros ojos
y nos abraza en un sueño lleno de letras.
No conocemos el final del camino
porque no recordamos como comenzamos,
porque jamás hablamos del final,
Quizás por miedo, quizás por costumbre,
Quizás porque amamos volar juntos.
Me poso en sus alas haciéndola reír
su risa es el combustible que mantiene
nuestro idilio volante en el aire
nos eleva sobre el sol y vemos
como pasan las sombras del ayer.
Abrazados en nuestra ruta aérea
somos un par de locos que no sabemos
nada más que volar unidos.
Diego
ç
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